"Justicia para todos por igual" nos dice Fernanda Vallejos, parafraseando a quien define como un "querido maestro", Alejandro Rofman. Una editorial que exige justicia para el caso López. Pero que no mira para el costado a la hora de señalar la corrupción estructural del poder económico. Exige, entonces, investigación y castigo para los ricos y poderosos que fugaron U$S 400.000 millones al exterior, para los involucrados por los U$S 3.000 millones en cuentas ocultas del HSBC, entre ellos Prat Gay, para los responsables de la fuga de 400 millones de dólares a través del JP Morgan, entre ellos la empresa Sideco de Macri, y directivos de Clarín, para los culpables por fuga y evasión, expuestos por los Panamá Papers, entre ellos Macri, sus familiares y varios funcionarios de Cambiemos, como Fernando De Andreis, Gustavo Arribas, Pablo Clusellas, Jorge Macri, o Néstor Grindetti; para quienes decidieron la devaluación mientras se enriquecían con el dólar futuro, como Torello, Lopetegui, o Quintana; para los responsables de la estafa del megacanje por lo que Federico Sturzenegger tiene un procesamiento firme ratificado por la Corte Suprema; por el encubrimiento de la fuga de 26.000 millones de dólares que ejecutaron los bancos extranjeros en 2001, con JP Morgan a la cabeza, de la que fue acusado Prat Gay. Pero además, dice Vallejos, queremos justicia: ¡justicia social! para todos los argentinos. Para los jubilado, víctimas del desmantelamiento del sistema previsional; para los trabajadores a quienes en cinco meses nos arrebataron 20.000 millones de dólares de nuestros bolsillos para transferirlos a empresas multinacionales del agro, la industria, la minería, los servicios y la banca...